La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró este jueves (30.01.2020) la emergencia internacional ante el rápido aumento de los pacientes afectados por el coronavirus de Wuhan, en China. Un comité de emergencia de expertos, convocados por el director general de la OMS, declaró esta alerta, tras la aparición de varios contagios entre personas en países como Alemania, Japón, EE.UU. o Vietnam, en pacientes que no habían viajado recientemente a China, lo que significa que el coronavirus podría extenderse a lugares con sistemas sanitarios más débiles.

Los coronavirus, son una familia de virus que puede afectar principalmente a la vía respiratoria llegando a ocasionar desde resfríos comunes hasta bronquitis o neumonías. Los síntomas iniciales semejan a la gripe por influenza, incluyendo decaimiento general, fiebre y síntomas gastrointestinales. Aunque son más frecuentes en otoño o invierno, se pueden adquirir en cualquier época del año.

Aunque la mortalidad del virus epidémico es del menos del 5%, se desconoce a que personas podría afectar de forma severa, además, es preciso recordar que personales vulnerables como niños, gestantes, adultos mayores y personas que padecen enfermedades crónicas o debilitantes, pueden ser susceptibles a mayor riesgo de complicaciones. Los médicos se asegurarán de que los pacientes puedan respirar adecuadamente y de darles soporte vital si es necesario. Aparte de eso, el beneficio de mantener a las personas en el hospital sería aislarlas de la población general, para que no puedan infectar a otros. Se deben rastrear a los contactos.

El contagio se produce generalmente por vía respiratoria, a través de las gotitas respiratorias que las personas producen cuando tosen, estornudan o al hablar y el contacto con algunos animales de comercio en la zona endémica.

Para ser diagnosticado, estos virus pueden detectarse en diversas secreciones incluidas las respiratorias, asimismo puede buscarse en marcadores sanguíneos.

El tratamiento implica la atención médica hospitalaria de soporte general de vida, con aislamiento preventivo. Puede requerirse el uso de medicamentos diversos según corresponda.

Hasta la fecha no se dispone de vacuna alguna ni de tratamiento específico para combatir la infección por coronavirus, por ello, mantener una higiene básica es la forma más eficaz de evitar contraer este virus en los lugares en los que existe un mayor riesgo de transmisión, fundamentalmente las zonas del planeta en las que se han registrado casos. Es conveniente lavarse las manos con frecuencia y evitar el contacto con personas ya infectadas, protegiendo especialmente ojos, nariz y boca. Asimismo, consumiendo alimentos bien cocidos.

Dr. Joseph Sánchez Gavidia
CEO Salud Total
Centro de Investigación en Salud Pública
Universidad de San Martín de Porres